FSC-CCOO Madrid | 25 de abril de 2024

Instituciones Penitenciarias recorta la prevención y protección del personal penitenciario frente al Covid-19

    La Secretaría General de Instituciones Penitenciarias ha publicado nuevas directrices para la prevención en las prisiones, que según CCOO son un claro retroceso sobre las anteriores, que aún no cubrían la protección de todo el personal penitenciario.

    21/04/2020.
    Prisiones

    Prisiones

    CCOO denuncia que Instituciones Penitenciarias sigue tomando medidas que afectan a las condiciones laborales y de salud del personal de forma unilateral y sin negociar con los representantes legales de los trabajadores, que ponen en riesgo la seguridad del personal y de la población reclusa.

    Los recortes se han evidenciado en la sustitución de mascarillas quirúrgicas por otras higiénicas de menor calidad y sin ninguna protección ni certificado de la CE, que obligan a usar durante 40 horas al personal penitenciario, cuando es un material desechable que dura 4 horas, por lo que el riesgo de contaminación cruzada se incrementa.

    Por otra parte, ignorando la realidad penitenciaria, donde el contacto es estrecho en las tareas, excluyen de ser “contacto directo” a la inmensa mayoría del personal, para ahorrar en EPIs aun a costa de incrementar los riesgos para la salud de los trabajadores y sus familias.

    Se elimina la actuación preventiva con un trabajador/a asintomático/a que sea portador del virus o que realizándose un test rápido obtenga resultados no concluyentes y se rebaja la prevención para los trabajadores con sintomatología leve por Covid-19. En todos estos casos se puede continuar trabajando, con el evidente riesgo de extensión de la enfermedad.

    Lo más grave es la rebaja en la protección de los trabajadores sensibles al coronavirus, personas con graves patologías de base o mayores de 60 años, en contra de la última guía de buenas prácticas aprobada por el Gobierno y el Ministerio de Sanidad el 11 de abril. Los Servicios de Prevención de IIPP están obligando a este personal a mantenerse en sus puestos, expuestos a un posible contagio, mientras son evaluadas posibles adaptaciones dentro de la misma prisión, con lo que se mantiene el riesgo. Recordamos que los tres fallecimientos que registra IIPP pertenecían a este colectivo de riesgo.

    CCOO sigue defendiendo la necesidad de mantener medidas de prevención y protección especiales en las prisiones si queremos evitar que se repita la dramática situación de las residencias de mayores. El servicio público penitenciario es especialmente vulnerable por el envejecimiento de las plantillas y el gran volumen de inmunodeprimidos y con patologías previas entre la población reclusa.

    CCOO exige que no se recorte en seguridad laboral y se garantice la protección de todo el personal penitenciario y de la población reclusa, con los medios adecuados de los que se ha privado a las prisiones desde el inicio de la pandemia.

    Dotación suficiente de mascarillas quirúrgicas para el personal que no esté en contacto estrecho con los internos.
    Dotación suficiente de EPIs necesarios (mascarillas FPP2) para todo personal con contacto estrecho, incluyendo al personal de vigilancia cuyas tareas se realizan a menos de un metro de la población reclusa durante largos periodos de tiempo.
    Control de la temperatura de todas las personas que acceda a la prisión como primera medida de criba frente al Covid-19.
    Realización de test masivos en las prisiones, tanto al personal como a la población reclusa para conocer el nivel de penetración del virus. Es urgente realizarlos en los centros que registran más casos de coronavirus.
    Evaluación urgente de los riesgos de los puestos de trabajo, por las personas y tareas que se desarrollen en los mismos para determinar los riesgos existentes en cada caso, el nivel de exposición al virus y las medidas preventivas a adoptar.
    Negociación con los representantes de los trabajadores de todas las modificaciones de las condiciones laborales para enfrentar el Covid-19.
    Adecuación de espacios habilitados respetando las normas de distanciamiento social para evitar que el personal realice las comidas dentro de sus turnos de trabajo fuera de los puestos de trabajo.
    Evaluación de todo el personal que responda a los criterios del Ministerio de Sanidad como trabajadores vulnerables, y las actuaciones necesarias para salvaguardar su vida.

    CCOO defiende que lo primero es la vida y la salud de los trabajadores y trabajadoras, por lo tanto, un servicio esencial como son las Instituciones Penitenciarias tiene que estar en condiciones de garantizarlas sin ningún género de dudas.

    La entrega y el sacrificio del personal penitenciario para salvaguardar a la población reclusa y el servicio público penitenciario en unas condiciones tan difíciles se merecen, como mínimo, algo tan básico como que se cumplan las medidas preventivas más elementales y se les proteja para seguir garantizando un servicio público esencial.

    CCOO exige respeto frente al silencio que trata de ocultar la dramática realidad penitenciaria. Es el colectivo penitenciario la barrera principal para evitar que el COVID entre en los patios de las prisiones y, se está haciendo sin la protección ni el reconocimiento del coste que esta batalla tiene para el personal penitenciario.

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