FSC-CCOO Madrid | 28 de marzo de 2024

La salud y la seguridad deben integrarse en el conjunto de derechos fundamentales de la OIT

    Este 7 de octubre, en la Jornada Mundial por el Trabajo Decente, el Sector Estatal de Telecomunicaciones de CCOO se suma a UNI Global Union y al movimiento sindical internacional para pedir a la Organización Internacional del Trabajo (OIT) que designe la seguridad y la salud en el trabajo como un derecho fundamental. 

    07/10/2021.

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    7 de oct Jornada Mundial del Trabajo Decente

    7 de oct Jornada Mundial del Trabajo Decente

    Hay que destacar las medidas vitales que desde los sindicatos se han tomado para proteger a todas las personas trabajadoras durante la pandemia de la COVID-19. Además, las organizaciones sindicales exigen que estos trabajadores/as tengan derecho a un sindicato y a comités de salud y seguridad elegidos de forma independiente.

    Tras casi 18 meses de pandemia, los sindicatos del mundo han demostrado el papel fundamental que desempeñan en la protección de la salud de las personas trabajadoras, mediante la negociación de normas relativas a los EPI, el coeficiente de personal y garantizando el "derecho a la desconexión", a no estar bajo vigilancia y la protección contra la violencia en el trabajo.

    Está claro que estas medidas son aún más sólidas cuando los trabajadores/as pueden dirigirse a un representante de seguridad en el trabajo para plantear sus preocupaciones y obtener formación y respuestas, sin temor a represalias.

    En los sectores de servicios relativamente "más seguros", cuestiones como la salud y la seguridad nunca deberían minimizarse ni restársele importancia. Y aunque, cada vez más, estas medidas de seguridad exigidas por la pandemia hayan quedado atrás hay nuevos retos en materia de salud laboral que se están acelerando en nuestro mundo digitalizado y que exigen que la salud en el trabajo se convierta en una gran prioridad para todas las personas trabajadoras.

    Algunos países ya exigen que muchos lugares de trabajo cuenten con delegados/as de seguridad o comités de seguridad elegidos de forma independiente. Esto debería convertirse en la norma en todas partes. Los comités de seguridad son una herramienta esencial: los ojos y los oídos en el trabajo para asegurarse de que las normas no son simples palabras escritas.

    Y varios países ya han declarado la COVID como enfermedad profesional, lo que también debería generalizarse para que las personas trabajadoras expuestas a enfermedades infecciosas en el trabajo puedan recibir atención y prestaciones de SST.

    "La COVID-19 ha puesto la seguridad en el trabajo en primer plano en el debate mundial sobre los derechos de las personas trabajadoras y puesto de manifiesto el papel indispensable de los sindicatos para mantenerlas a salvo de las antiguas y nuevas formas de riesgos en el trabajo", dijo Christy Hoffman Secretaria General de UNI Global Union. "Ha llegado el momento de establecer nuevas normas de seguridad mediante la negociación y la reglamentación destinadas a proteger a todos. El derecho a la salud y la seguridad es un derecho fundamental". 

    En la Declaración del centenario de la OIT de 2019, adoptada unánimemente por gobiernos, sindicatos y empleadores, se reconoce la importancia de la salud y la seguridad en el trabajo para todos los trabajadores y trabajadoras. Desde entonces, la pandemia unida a los peligros creados por la amplia utilización de la tecnología en el trabajo ha añadido nueva urgencia para hacer de la salud y la seguridad un derecho fundamental y ha demostrado que los sindicatos son esenciales para aplicar y hacer cumplir ese derecho.